lunes, 20 de marzo de 2006

Resultado confuso del convenio de Metrovías

La burocracia de la UTA firmó un acuerdo salarial para los trabajadores de Metrovías en el Ministerio de Trabajo. El Cuerpo de Delegados del Subte se negó a firmar.
Los trabajadores reclamaban incorporar al básico la cifra no remunerativa (en negro) de aproximadamente 450 pesos que vienen percibiendo desde noviembre del año pasado, un aumento del 35% y la elevación de la antigüedad al 2%.
Además, una cláusula gatillo de ajuste por inflación y la absorción por la patronal del impuesto a las ganancias a los obreros. Los tercerizados reclamaron su definitivo reconocimiento como trabajadores de UTA.
El acuerdo, en cambio, otorga un aumento del 16% del básico, y la persistencia de los 450 pesos logrados en noviembre como suma fija. De todo el resto ni una palabra. El acta incluye una virtual cláusula de paz social.(1)

16%, política de Estado

El gobierno desplazó literalmente a la patronal en la discusión. Llegó a amenazar con no homologar aumento alguno superior al 16%.
Esto, en función de contener un reclamo salarial de conjunto.

¿Podía quebrarse este tope?

Los trabajadores del Subte llegaron a esta discusión en mejores condiciones que las planteadas en el conflicto anterior de noviembre. Con la incorporación de trabajadores tercerizados al plantel de Metrovías, con el impulso de otros aún no incorporados a convenio pero comprometidos a luchar por el mismo reclamo salarial, finalmente con un escenario en el que las discusiones de convenio y salarios en otros gremios podían plantear una lucha común.
La burocracia de la UTA apoyó la propuesta oficial. El Cuerpo de Delegados del Subte no fijó una posición. Mientras los delegados organizados en la agrupación Trabajadores de Metrovías se pronunciaron por el rechazo y la continuidad del plan de lucha, otros dejaron que las asambleas decidieran sin fijar posición. El resultado fue votaciones divididas, aunque los informes de lo ocurrido son confusos.
Los compañeros de empresas tercerizadas que han sido incorporados al convenio como Taym y Fiel, tuvieron escasas posibilidades de expresar su posición y su voto en las asambleas.
La agrupación Trabajadores de Metrovías propuso en el Cuerpo de Delegados que no se firmara la propuesta del gobierno y convocar a una asamblea general de todos los trabajadores del subte, sugiriendo un paro de actividades u otro método para garantizar la concurrencia. Se invocó incluso el ejemplo de Foetra (sindicato telefónico) para decisiones semejantes. La asamblea hubiera permitido apreciar más a fondo la disposición de la base obrera y medir las fuerzas alternativas.
El conjunto del Cuerpo de Delegados no adoptó esta posición y tampoco participó de la firma del acuerdo que finalmente fue concretada por la UTA.
Los trabajadores tienen planteado en el próximo período la lucha por la incorporación definitiva de todos los trabajadores tercerizados y la apertura de la discusión paritaria para el resto de las condiciones de trabajo, para lo cual fue elaborado el anteproyecto obrero.

(1) Es inexacta la información de Clarín sobre “un plus por antigüedad del 1% sobre el básico” — que ya se cobra, como que el reclamo referido al impuesto a las ganancias haya sido superado por el aumento — las categorías mas altas sufren descuento.